La Diputación Provincial de Soria ha aprobado encargar la elaboración del censo de instalaciones y emplazamientos con amianto en toda la provincia, un trabajo que tendrá una duración de 12 meses y un coste de 337.204,94 euros. La institución asumirá así una tarea que, según explicó, "deberían elaborar los ayuntamientos", con el fin de disponer de un mapa provincial que permita planificar la retirada del amianto en los próximos años.

El proyecto incluirá la identificación de tejados de uralita, bajantes y tuberías de fibrocemento, elementos que serán inventariados para su gestión posterior. Las instalaciones o emplazamientos de carácter público con mayor riesgo deberán estar gestionadas antes de 2028, según la normativa vigente.

La Junta de Castilla y León ha manifestado su disposición a colaborar económicamente con la Diputación, valorando una aportación regional cercana a los 100.000 euros, cuya cuantía definitiva se concretará una vez concluido el censo.

El objetivo de este mapa provincial es facilitar la planificación de una campaña de retirada progresiva, dentro de la estrategia autonómica que actualmente subvenciona la eliminación del amianto en centros de trabajo e incluso la colocación de nuevos tejados en sustitución de los antiguos.

Además, en la misma sesión, la Junta de Gobierno aprobó la concesión de las subvenciones de apoyo al mantenimiento de bares y centros de ocio rural incluidas en el Plan Soria 2025. En total, se concedieron 30 ayudas por un importe global de 50.000 euros, distribuidos mediante prorrateo entre los beneficiarios. La cuantía general fue de 1.793,21 euros por solicitante, salvo en tres casos en los que el local no permaneció abierto durante el tiempo estipulado.