ASAJA Soria ha puesto el foco en Bruselas durante la celebración de su asamblea navideña, en la que ha hecho entrega de los premios Espiga y Tizón 2025, correspondientes a la decimonovena edición de estos galardones, con Europa y la PAC como eje central del debate.

El premio Tizón, de carácter negativo, ha recaído "por total consenso" en la Comisión Europea, con Ursula von der Leyen al frente, por "relegar a los agricultores en los acuerdos con terceros". ASAJA ha advertido del impacto que la actual guerra comercial global, la situación derivada de la guerra en Ucrania y la posible aplicación del mecanismo de ajuste en frontera por carbono (CBAM) tienen sobre los mercados y las reglas del comercio internacional.

Según la organización agraria, en este contexto la Comisión Europea ha acelerado "de manera agitada" la firma de acuerdos comerciales en los que el sector agrario "se siente moneda de cambio", quedando la "preferencia comunitaria" —principio básico de la Unión Europea— "a los pies de los caballos o al de otros sectores interesados en ganar estabilidad en esos mercados".

El premio Espiga 2025 ha sido concedido al COPA-COGECA, por su labor continuada en defensa de la agricultura y la ganadería europeas. La entidad representa a más de 22 millones de agricultores, ganaderos y familias, además de cooperativas agroalimentarias, forestales y pesqueras de toda la Unión Europea.

ASAJA ha destacado, entre otros argumentos, la respuesta mayoritaria de los eurodiputados contra la actual propuesta de la PAC post 2027 y el Marco Financiero Plurianual, así como la organización de la manifestación celebrada en Bruselas el pasado 18 de diciembre, como ejemplos del trabajo diario del COPA-COGECA.

Aunque inicialmente estaba prevista la presencia del presidente nacional de ASAJA, Pedro Barato, el galardón fue finalmente recogido por el presidente regional, Donaciano Dujo. En su intervención, Dujo enumeró las principales reivindicaciones del sector de cara a 2026, subrayando el momento "complicado" que atraviesan agricultores y ganaderos por "la falta de rentabilidad de las explotaciones, la inseguridad de la política agraria comunitaria y la incertidumbre sanitaria en el sector ganadero".

Dujo insistió en que los acuerdos con Mercosur y terceros países solo deben firmarse si los productos importados cumplen "las mismas exigencias que se imponen a los agricultores europeos". "Así Europa no produce, se importa de fuera y los ciudadanos consumen productos de menor calidad y más caros", denunció, mostrando su rechazo a una futura PAC que, según ASAJA, reducirá su financiación en un 22% y recortará inversiones a partir de 2028.

En este escenario, el presidente regional de ASAJA avanzó que la organización "no se va a quedar quieta" y anunció nuevas movilizaciones tras la protesta de Bruselas, con el objetivo de lograr "unidad de acción, pero siempre con una máxima: seremos y haremos lo que quieran los socios, no lo que nos diga nadie desde fuera".